TERESÓPOLIS.- El partido número 100 de Brasil en Copas del Mundo llega envuelto en su mar de dudas por el nivel de juego de la verdeamarelha.
Es que durante la primera semana de Brasil 2014 se cayeron las certezas que rodeaban al scratch desde hace un año, cuando logró la Copa Confederaciones. En ese entonces, según la prensa local, Brasil tenía un equipo fuerte, un sistema táctico definido, una defensa sólida y un dúo de ataque temible: Neymar y Fred.
Pero esas convicciones empezaron a esfumarse el 12 de junio, en el debut del equipo que dirige Luiz Felipe Scolari. Brasil le ganó a Croacia por 3-1 tras estar abajo en el marcador y con una posible ayuda del árbitro, que señaló un penal muy dudoso sobre Fred cuando el choque estaba 1-1.
Y las dudas se profundizaron tras el sufrido empate sin goles con México, que hizo que, por primera vez desde Argentina 1978, Brasil llegara al tercer partido de la fase de grupos sin tener asegurado su pase a octavos de final.
El “ayuno” goleador de Fred, la poca eficiencia de los laterales Dani Alves y Marcelo para armar ataques por los costados, la escasa creatividad del medio campo, y la excesiva dependencia del astro Neymar son los problemas detectados por los expertos en esta versión de la seleçao.
Pero las dudas no son sólo futbolísticas. El partido que disputarán mañana Brasil y Camerún será especialmente controlado por la FIFA ante el temor de un posible arreglo de resultados durante la recta final de la fase de grupos del certamen.
“Si tomamos en cuenta todos los criterios, ése será sin duda un partido de riesgo”, dijo el director de seguridad de la FIFA, Ralf Mutschke.
Brasil, al que le vale un empate para clasificarse a octavos, se enfrentará a un Camerún que ya está eliminado del torneo. Por la actual constelación del Grupo A, este partido es “más vulnerable que el partido inaugural o la final. Hay que estar muy atentos a todo”, subrayó Mutschke. (DPA-Especial)